Luego de que el Gobierno fijara un nuevo precio para el bioetanol (el que se elabora a partir de caña de azúcar quedó en 22,16 pesos por litro y el que se hace a partir de maíz en 19,45 pesos), en ambos casos para su mezcla obligatoria con nafta, Patricio Adam, director Ejecutivo de la Cámara Bioetanol Maíz, advirtió que esos valores no son suficientes para amortizar la gran inversión que hicieron para aumentar la capacidad instalada.
El dato que brindó Adam para marcar el deterioro que tuvo el precio del etanol es que, “históricamente con 79 litros de etanol comprabas 1 tonelada de maíz, y hoy se requieren 370 litros para comprar esa misma tonelada. Se pasó de un extremo al otro”, advirtió a Bichos de Campo.
“Si comparamos con la nafta, esta aumentó 75%, el dólar subió 95%, mientras que el etanol aumentó 60% en todo el año, lo que nos deja en una posición bastante incómoda. No olvidemos que hay 30 millones de toneladas de maíz que se exportan sin agregar valor, cuando buena parte podría utilizarse acá para producir más etanol”, destacó Adam.
Adam se quejó porque “cuando aumenta la nafta siempre hablan de un aumento de los biocombustibles, pero cuando baja el precio de estos, eso nunca se refleja en el precio de surtidor. De todos modos, tenemos un bioetanol muy competitivo y de esto se habló mucho con el Gobierno. Pero lamentablemente volvieron a cambiar las autoridades en Energía, lo que nos obliga a empezar de cero en explicar al consumidor cómo puede el etanol ser una solución, brindando un combustible mas barato, ecológico y que fomenta el desarrollo de las economías regionales”.
Respecto del proyecto para implementar autos con motores ‘flex’, Adam dijo que “estaba bastante avanzado, pero tras la salida de Iguacel del Gobierno, se atrasa todo y esperamos retomarlo. Es una solución para los consumidores poner dos combustibles a competir. No pedimos subsidios ni nada raro. Queremos pagar los impuestos que haya pagar. Es simplemente una cuestión de voluntad política. De Mendiguren estaba de acuerdo, y lo mismo Iguacel, pero cuando abandonan sus sillas se vuelve difícil implementarlo”, resumió.
El director ejecutivo de la Cámara Bioetanol Maíz, agregó que “queremos pasar a autos flex en menos de un año y medio y vamos camino a un nuevo paradigma de los combustibles líquidos. Hoy el corte de etanol con naftas es del 12% en Argentina, mientras que en Brasil la mezcla con las naftas llega al 85%. Lo paradójico es que en Argentina se hacen los autos que luego van a Brasil y que después se cortan allí con etanol al 27% o al 100%”.
Fuente: bichosdecampo.com
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